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A paso firme

miércoles, 22 de febrero de 2012

Vélez goleó a las Chivas de Guadalajara en condición de local y se consolidó como único puntero del grupo 7 al término de la segunda fecha de la Copa Libertadores 2012. Los goles del equipo de Gareca fueron convertidos por Mauro Obolo en primer instancia y luego Federico Insúa amplió la ventaja en dos oportunidades. Por su parte, el elenco mexicano no conoce el triunfo en lo que va del año ya que no ha ganado tanto en el campeonato local como el la Copa Libertadores.


El comienzo del encuentro tuvo una situación de gol al minuto de juego cuando el volante Federico Insúa realizó un buen desborde por el sector izquierdo y sacó el centro atrás para que conecte Fabián Cubero que remató de volea y la pelota pasó muy cerca del segundo palo. A los pocos minutos de esa acción, fue Chivas quien se aproximó con cierto riesgo al arco custodiado por Marcelo Barovero con una gran jugada de Arellano que llegó hasta la línea de fondo por la banda izquierda y ejecutó un centro atrás que ningún jugador mexicano pudo conectar para ponerse en ventaja.

Promediando la mitad de la primera etapa la intensidad del partido disminuyó notablemente con el equipo local manejando los tiempos del partido a base de juego asociado y tenencia de pelota mientras que Chivas ejercía una gran presión con un sacrificado despliegue físico de sus jugadores. Con el transcurso de los minutos la tarea ofensiva de Vélez se fue desdibujando y Chivas comenzó a sentirse cómodo con la igualdad sin goles con la que ambos equipos se retiraron al descanso.

El comienzo de la segunda etapa fue muy similar al desarrollo de los primeros 45 minutos con el juego centrado en la mitad de cancha y ambos equipos carentes de profundidad en la ofensiva. Tal es así, que la primer situación de peligro que se produjo en el segundo tiempo se dio recién a los 15 minutos con una asociación entre Martínez y Papa por la izquierda que de milagro no culminó con destino de red. Pero el gol no iba a demorar mucho en llegar ya que cinco minutos más tarde, Vélez se apuró en la realización de un lateral que permitió que Francisco Cerro domine la pelota en tres cuartos de cancha y habilite de manera perfecta a Mauro Obolo que marcó el 1 a 0 a favor y desató la alegría del público en Liniers.

A partir de la desventaja, el equipo visitante se vio obligado a ir hacia adelante y como consecuencia de ir en busca del empate no pudo mantener su orden defensivo, con el elenco mexicano hundido en la desesperación por la búsqueda de la igualdad Vélez comenzó a manejar la pelota con mayor tranquilidad y esto le permitió aprovechar de manera satisfactoria los espacios libres para aumentar la ventaja gracias a dos goles de Federico Insúa en menos de cinco minutos. Luego del tercer gol, no hubo tiempo para más y el equipo de Gareca esperó tranquilamente que el partido llegue a su fin y de esa forma volver a ganar por tres goles en el certamen internacional al igual que la primer fecha cuando venció a Defensor Sporting en Montevideo.

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